18.2.06

El caso Lehmann-Haye o las Pinzas olvidadas dentro del Paciente: Una Cirugía que Disecciona las Entrañas del Mundo del Arte Neoyorquino.

Julie Mehretu en su estudio de Nueva York con una obra en proceso.


Suelen ser muy raras las ocasiones en que el mundo del arte contemporáneo revela sus mecanismos más ocultos, y cuando sucede, casi es una regla que sea en tensas condiciones, las cuales al volverse públicas, nos muestran sesgada pero claramente la maraña de intereses y fuerzas que rigen a éste no pocas veces oscuro medio, todavía muy poco regulado y definido por David Zwirner, como “La belleza del mundo del arte es que es el último negocio de apretón de manos”. La pesadilla que tuvo que vivir desde comienzos del dos mil cuatro Christian Haye, fundador en 1998 de la galería neoyorquina The Project, es el mejor ejemplo en lo que va de la primer década del siglo veintiuno de tales tensiones, éste es un vistazo de lo revelado por la millonaria demanda que ganó el coleccionista Jean-Pierre Lehmann en contra de The Project, y el cual es el primer caso a nivel mundial que involucra los pormenores para acceder al arte contemporáneo:

Haye estableció un aparentemente favorable acuerdo con éste millonario coleccionista Franco-Suizo, esposo de Rachel Lehmann de la galería Lehmann-Maupin, también de Nueva York, el cual consistía en prestar a Haye en febrero del 2001, 75,000. Dls –el mismo año en que Haye abrió la segunda sucursal de su galería en Los Angeles – ello a cambio de tener el derecho de que se le ofrecieran antes que a cualquier otro ponente obras de los artistas de El Proyecto, además, Lehmann recibiría un descuento del 30 por ciento sobre lo cotizado, esto implicaba para el Suizo “sacrificarse” y tener que llegar a dquirir arte a The Project por al menos 300 mil Dls hasta completar no setenta y cinco, sino cien mil dólares, donde 25 mil Dls. son un extra generado por intereses; Lehmann argumentaba que con éste proceder trataba de comprar acceso para estar en primera fila y poder escoger los mejores trabajos de la producción reciente de un artista, rebasando a otros treinta potenciales compradores, como directores de museos o coleccionistas de primer orden; así, llegó a comprar en el 2001 tres videos de Paul Pfiffer de 60 mil a 42 mil Dls. por lo tanto, usando 18 mil de los cien mil Dls. que tenía como crédito en descuento; pero las dificultades comenzaron con la obra de la pintora Julie Mehretu – una especie de versión light y decorativa de Marc Lombardi –, ya que según Lehmann no se le informó para poder adquirir obra de ella en el periodo que va desde el principio del acuerdo en febrero del 2001 y hasta finales del 2003; pero, salvo una excepción en febrero del 2003 cuando se hizo de una pintura de 32 x 54 pulgadas, cuyo costo original era de 25 mil Dls., siendo el precio final 17, 500. Dls., suma que incluía el 30 por ciento de descuento; sin embargo, antes que a Lehmann, tal y como se dio a conocer en el papeleo del juicio, Haye vendió diversas pinturas de Mehretu con alrededor de un diez por ciento de descuento a varios compradores durante el 2001, como a Douglas Fogle, quién adquirió una pieza en 18 mil Dls. para la colección del Walker Art Center, otra más por 20 mil Dls. para Jay Jopling de la poderosa galería White Cube, y a quién se le descontó un veinte por ciento, llegando la lista hasta Jeanne Greenberg Rohatyn por 21,250 Dls., Michael Danoff, por 21,726. Dls., Marvin y Alice Kosmin, quienes pagaron sin descuento alguno 40 mil Dls., Thomas Dane 27 mil y Dimitri Daskolopoulos, quién pagó 51 mil Dls. por la pintura de gran formato de 8.5 pies de largo por 18 de alto, Retropistics: A Renegade Excavation; así, la historia se repite con mayores precios en el 2002: The Project vendió obra a Thomas Dane por 35,468 Dls. a la posterior socia de Haye, Jenny Liu por 8,147.35. esto es, con un substancial descuento del precio de lista fijado en 15 mil Dls. y a Jeanne Greenberg Rohatyn por 43,452 Dls. The Project también vendió una pintura y diez dibujos al dealer de Londres Jay Jopling con un 40 por ciento de descuento. Durante el 2003, Greenberg Rohatyn compró cuatro pequeños trabajos – de la misma serie que la pintura vendida a Lehmann, ya antes referida – por $12,500, esto representa un cincuenta por ciento de descuento en cada uno, contra el 30 % de Lehmann; en el 2003, compradores de pinturas mayores fueron nuevamente el Walker Art Center, pagando 100,000, de una primer suma por 120,000 Dls. y Dennis y Debra Scholl, con 80,000 Dls., quienes sin ningún privilegio liquidaron el precio total; según el abogado de Lehmann, Peter R. Stern, de McLaughlin & Stern, The Project probablemente vendió Empirical Construction, 2003, pintura de 10 x 17 pies al Museo de Arte Moderno de Nueva York, la cual fue exhibida en la Bienal de Estambul el mismo año en que fue hecha y posteriormente se mostró en la Bienal Whitney en el 2004; aunque la transacción al MOMA fue hecha al final del 2003, Stern asevera que se asentó en lo libros sólo hasta al principio del 2004; rematando éste periplo de obra, el que The Project mandó tres grandes pinturas y ocho obras en papel hechas en el 2003 a la galería Carlier Gebauer de Berlín para una muestra en enero del 2004; En tales circunstancias, ninguno de estos trabajos fue ofrecido a Lehmann, según Stern, se vendieron 40 trabajos de Mehretu durante el periodo del acuerdo, y sólo se ofreció una pieza a Lehmann, agregando éste abogado: “…poniendo la mitad de la producción de Mehretu a la disposición de Jeanne Greenberg, la mitad a White Cube y la tercera parte a Carlier Gebauer, vendiendo el Right of First Refusal a otras cuatro instancias”.

En la información y prensa sobre éste caso pueden encontrarse una serie de atenuantes que matizan sus diferentes aristas: Según el abogado de Haye, Alan Effron, The Project tenía la impresión de que Lehmann estaba particularmente interesado en adquirir una pintura de gran formato, Haye señaló que al momento de la petición del coleccionista, Mehretu sólo había producido 3 o 4 pinturas de tales dimensiones, por lo tanto, instó a Lehmann a ser paciente; también se ha aceptado por parte de todos los involucrados en la riña legal, que se invitó al coleccionista a visitar antes de su inauguración la primer exposición de Julie en The Project durante noviembre del 2001, pero Lehmann no coincidió con el montaje por encontrarse de negocios en Europa, aun cuando a su regreso mostró interés en dos pinturas de gran formato, éstas ya habían sido vendidas, sin olvidar, que en la lista de espera de la galería tenía otros cuatro coleccionistas, entre ellos Dennis Scholl y la dealer neoyorquina Jeanne Greenberg Rohatyn, también poseedores del Derecho al Primer Rechazo; por su parte Lehmann de 66 años, es considerado un coleccionista serio, el cual ha declarado que invierte cerca de un millón de dólares al año en arte, con una colección formada por alrededor de mil obras a lo largo de 25 años de actividad, sin trazas de especulador, ya que sólo ha revendido probablemente diez.

'''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''Christian Haye.Christian Haye.
Pero lo que desató la expresa furia de Lehmann fue cuando consultó el catálogo de la exposición individual de Mehretu en el Walker Art Center (de abril 6 - agosto 10 del 2003); y cayó en la cuenta que varias de las pinturas presentadas fueron vendidas a coleccionistas como los antes referidos, y por lo tanto, nunca le fueron ofrecidas a él, tal y como lo estipulaba el acuerdo pactado con Christian Haye; de hecho, después de ver el catálogo del Walker, Lehmann escribió inmediatamente a Haye: "El catálogo. . . Indica que usted vendió por lo menos 5 pinturas mayores de Julie a un dealer local [Jeanne Greenberg Rohatyn]. Esto es totalmente inaceptable, y usted no ha cumplido con su parte del contrato. Tenemos que solicitarle el pronto pago de nuestro crédito restante: $17,500.”, cantidad que The Project pagó inmediatamente y sin ninguna aclaración o disculpa; Si bien, Lehmann no adquirió un mayor número de obras de Mehretu, éste crédito restante de 17, 500 Dls. era la parte que restaba de las compras que a pesar de sus disputas, Jean Pierre le había realizado a Haye, entre ellas seis piezas en total de Paul Pfiffer por un monto aproximado a los 260 mil dólares, cantidad que ocupó 82,500 Dls. de su crédito para descuentos establecido en su trato con Haye, con un tope de cien mil dólares; otro sesgo del punto de vista de Christian, es que el asunto verdaderamente importante puesto en juego en el pleito, es el referente a la habilidad de la galería para poner los intereses de sus artistas ante todo, procurando vender a museos y seleccionar las exhibiciones que podrían resultar ventajosas para la carrera de un artista. "El pleito era un instrumento para obligar a una galería pequeña y joven a dar a un coleccionista el objeto de su deseo" según dijo Effron, el propio Haye declaró que en algún momento consideró que la demanda era un recurso más promovido por Jean Pierre para que éste se pudiera colocar al frente de la lista de espera; Otro rasgo dramático, pero legal, fueron las restricciones que Lehmann impuso en la relación entre Haye y su banco, obstaculizando la libre transferencia de dinero, e incluso, el extender o cambiar cualquier cheque; según la nota de Artnet del 26 de abril del 2005, Lehmann la ha tomado también contra Mehretu, ya que el millonario al pretender encontrar vínculos entre los intereses financieros de Haye para con la obra de Julie, ha procurado una orden de restricción contra la propia artista; o como literalmente ha declarado a Noticias de Artnet el propio Haye: “El pleito tuvo este aspecto todo el tiempo, un coleccionista que acosa a una artista, diciendo lo que ella puede o no hacer con su trabajo”; por su parte, la reputada dealer neoyorquina Mariane Boesky acerca de porque simplemente Haye no procuró aceptar alrededor de dos cientos mil dólares de Lehmann por una pintura de gran formato de Mehretu, ha declarado: "Francamente, no puedo imaginarme que es lo que pasaba por la mente de Christian"; así, es factible encontrar diversas posiciones, como es el caso de David Rimanelli, en la sección Diary del 05.07.05 de Artforum, quién evidentemente, despliega su consideración a favor de Haye, inclusive dándole un tono racial al asunto, al citar una declaración de Stefania Bortolami: … "Es ridículo," ella me dijo. " pobre, pobre Jean-Pierre Lehmann el billonario, no obtuvo todos los Mehretus que quiso —como el que está ahora en el MoMA— y Christian, que es uno del muy pocos comerciantes negros en todo el mundo del arte, cuyo programa es totalmente político, resulta que queda como una basura conspiradora” en contraste, Rimanelli también hace referencia al articulo paralelo de Christopher Mason publicado en la revista New York, el cual según éste autor, representa para el criterio de varias personas dentro del medio del arte una grotesca posición a favor de Lehmann

Finalmente el dos de marzo del dos mil cinco, la juez Ira Gammerman de la Suprema Corte del Estado de Nueva York sentenció a Christian Haye a pagar 1.73 millones de dólares para subsanar los daños causados a Lehmann; según Peter R. Stern, éste coleccionista pudo haber adquirido ocho pinturas de Mehretu si Christian hubiera respetado el acuerdo; la millonaria cifra se obtuvo al combinar la diferencia entre los precios en que fueron vendidas estas ocho obras, adquiridas, por supuesto, por otros, y la estimación de su valor al momento del juicio, –esto es, el precio de venta de la galería y el de la posterior especulación –; pero, para fines legales, ¿cómo obtener la cotización de una obra de arte de una artista joven en pleno ejercicio y asenso?, ésta es la manera en que se estimó tanto la cotización de la obra de Mehretu en el momento del juicio, como los daños económicos resultantes que Lehmann sufrió debido a no haber podido adquirir previamente las pinturas de está artista de origen etiope:

La experta propuesta por Lehmann fue la consultora de arte, Ann Cook, quién dio – como era de suponerse –, una relativamente alta cotización a los trabajos de Mehretu, utilizando para ello la base de datos que tiene Artnet sobre subastas, (iniciativa de la que se han obtenido la serie de cifras e información que en ésta traducción e interpretación se muestran); Cook dio a la pintura de 7.5 x 12 pies, Dispersión, una cotización de 350 mil dólares, o su equivalente a 3,800 Dls. por pie cuadrado, cuyo precio de venta en la galería era de 50 mil Dls. y la cual fue vendida a Jeanne Greenberg Rohatyn en septiembre del 2002, por 43,452 Dls; para justificar su estimación, Cook citó como ejemplo, el que la obra Ringside 1999, de 6 x 7 pies también de Mehretu, fue vendida en subasta el 23 de septiembre del 2003 por 74,090 Dls., con un precio de salida de entre 20 y 30 mil dólares; momento en el que estaba en plena vigencia el trato Lehmann-Haye.

Pero, ¿Cómo establecía los precios de la obra de Mehretu el propio Haye?: Esto variaba según sus dimensiones, por una pintura de gran formato cuya medida era mayor a cien pies cuadrados, cotizaba el pie cuadrado a mil dólares; si la obra media entre cincuenta y cien pies cuadrados, la cotización por pie cuadrado era de 1,500 dólares; así, si la pieza media menos de cincuenta pies cuadrados el pie cuadrado se cotizaba en 2,500 dólares; estableciendo un precio mínimo para cualquiera de las pinturas de Mehretu en 25 mil Dls; artista quién por cierto, intuía el precio de su propio trabajo simplemente por una consideración general de su tamaño, lejos de las precisiones manejadas por Haye.

Por su parte, The Project propuso para esta misma pintura, Dispersión, con 90 pies cuadrados, la cotización de 135 mil dólares, esto quiere decir que desde los tres años previos hasta el juicio, Haye propuso un incremento que rebasaba sólo por arriba del cien por ciento el valor anterior de la obra de Mehretu.

La ex-directora de la galería Gagosian, Stefania Bortolani también testificó a favor de la defensa, dándole a Dispersión un estimado de 180 mil dólares, esto es, menor cotización que Cook, pero mayor que la de Haye.
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Rachel y Jean-Pierre Lehmann.
La testigo final del caso fue la propia Mehretu – quién sin tener conocimiento de ello, tenía en Jean-Pierre Lehmann, según confesión del propio coleccionista, a uno de sus más fieles admiradores y compradores –; Julie se desempeño tímida y dudosa en la corte, dando en cien mil dólares, a su propia obra, la cotización más baja expresada en el proceso respecto a tal pintura, Dispersión, confesándose sorprendida ante el cuestionamiento de la juez cuando tuvo información de las cantidades con las que se estimaba en el proceso a sus propias pinturas, es más, según ha declarado Mehretu, ella no tenía conocimiento del pleito, y ni siquiera del trato entre Lehmann y Haye, enterándose de la situación sólo hasta que fue citada a juicio; Stern, el litigante a favor de Jean-Pierre, irónicamente consideró: "no puedo creer que una galería llame a su artista para testificar acerca de cuán poco vale su trabajo"; sin embargo, Julie posteriormente llegó a calcular el que una de sus obras vendidas a los Scholl en 80 mil dólares aumento en dos veces y media, esto es, a 200,000, aun así, lo considerado por ésta artista se quedó corto respecto al incremento en cuatro veces que calculó Ann Cook, la experta propuesta por Lehmann.

Sin tener conocimiento del veredicto final por 1.73 millones en daños que Haye tendría que pagar, su abogado Alan Effron, calculó el monto a pagar, en 120,000 dólares mientras que el representante de Lehmann, Peter R. Stern estimó la cifra, en1.9 millones; a pesar de éste complejo caso, Mehretu no consideró dejar a Haye, tal y como lo demuestra el que en marzo del dos mil siete, ésta pintora continuaba en las filas de The Project.

Haye tuvo que semi-cerrar su sucursal de Los Angeles, estableciendo una alianza con Michel Maccarone, fundando MC, siglas de Michele y Christian (asociación todavía activa durante el 2007), una iniciativa que apoya proyectos de artistas, y la cual no maneja un Roster a la manera comercial, ubicada en el mismo inmueble que la anterior sucursal de The Project; mientras tanto, Christian brevemente lanzó el 5 de Mayo del 2005 como sucedánea de su galería, la efímera Projectile, con una muestra de dibujos de Mehretu; actualmente éste galero continua con The Project, a pesar de que en su momento tuvo que dividir la posesión de su galería con otros dos partners, Jenny Liu y Simon Preston, entrando en un semi-estado de bancarrota, a manera de una compañía fuera de funciones, pero estableciéndose una cuenta destinada a recaudar dinero de las futuras ventas que Haye realice de la obra de Mehretu, las cuales representan su participación por alrededor del cincuenta por ciento sobre el monto de una obra, típico acuerdo entre un galero y sus artistas; no obstante el surgimiento del tentativo acuerdo que significa ésta cuenta, Lehmann apunta que lo que le interesa de Haye es el obtener pinturas de gran formato de Mehretu.

Para el Armory Show del 2007 The Project Nueva York, ha renovado su staff, además de Haye, se encuentran con éste tozudo galero, Renaud Proch, el artista Giovanni Garcia-Fenech y Lizzy Cross; ¿Podrá Lehmann recuperar su credibilidad como coleccionista de confianza y así acceder a las mejores obras, ya no digamos de Julie Mehretu, sino de cualquier otro artista en cualquier otra galería?, ¿Será suficiente el poder del dinero para borrar cualquier rasgo de inflexible agresividad en Lehmann?.

Links:

http://www.artforum.com/diary/id=8930
www.artnet.com/Magazine/news/artnetnews2/artnetnews1-18-05.asp
www.artnet.com/Magazine/news/artnetnews2/artnetnews3-3-05.asp
www.artnet.com/Magazine/news/artnetnews2/artnetnews4-26-05.asp
www.artnet.com/Magazine/news/artnetnews2/artnetnews5-5-05.asp

www.elproyecto.com

http://nymag.com/nymetro/arts/art/11265/

1 comment:

Anonymous said...

http://artehabacuc.blogspot.com/2009_09_01_archive.html